Estoy de acuerdo con que no siempre se puede jugar bonito y ganar, esa combinación es difícil de lograr porque hay veces en que juegas bien y pierdes o lo haces mal y ganas, pero en los recientes cuatro partidos a los universitarios les ha faltado chispa.
Igualar a media semana con el Atlas no es del todo malo si consideras que el siguiente partido es en casa contra Querétaro, sin embargo, la forma en que se da el empate es lo que deja una interrogante sobre el cómo llegarán los del Pedregal a la liguilla por el título.
He de decir que el liderato general no es algo que me importe demasiado dado que muy pocos líderes han sido campeones y por aquello de las malditas dudas, no estaría de más que se deshicieran de esa presión antes de la “Fiesta Grande” (en una de esas sucede, así como está jugando el equipo).
Cuatro de seis puntos en menos de cinco días no es un saldo negativo, siete de nueve sería mejor, pero lo ideal es que regresen esos Pumas que preocupaban más a sus rivales que a sus aficionados con dinámica, velocidad y un desempeño parejo.
El detalle positivo es ver a Leandro de regreso, con todo y que ya no pesa lo mismo que antes en el club sigue siendo un jugador importante en el plantel, sobre todo al momento de poner una pausa para respirar y tomar una buena decisión… ahora sólo falta que él tome las decisiones correctas.
Danos tu opinión.
Por Luis Arteaga, colaborador de DalePumas.com
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