Los Pumas encontraron la forma de incendiar el área con goles clave en esta Liguilla. Tienen el secreto de una “chispa” adecuada, que los tiene con ventaja sobre Guadalajara para llegar a la final del Clausura 2o11.
Efraín Velarde se ha convertido en el hombre gol de los universitarios en esta fase final. Se ha vuelto un extraño goleador, que ha servido a su equipo para sorprender a las zagas rivales que pueden esperar a Dante López, Martín Bravo o Juan Carlos Cacho, pero nunca un remate del lateral izquierdo.
El secreto —de acuerdo con el canterano felino— no es otro más que acompañar la jugada. Como un puma sigiloso y hambriento admite que tiene la cualidad de “oler” el momento justo para aparecer y anotar.
“Yo siempre estoy oliendo la jugada, sabiendo qué es lo que va a pasar, así sea saque de banda, yo tomo buena posición para poder rematar a gol, como en el partido pasado”, narra el Chispa.
Durante todo el torneo, Velarde tuvo a su cargo acompañar en la defensa central a Darío Verón y Marco Antonio Palacios en una línea de cinco que por lo general completaban Javier Cortés y Jehu Chiapas.
Por eso el futbolista de 25 años le da el mérito a su entrenador, Guillermo Vázquez, por colocarlo en una zona de la cancha que le permite poder enfilarse hacia el área y aparecer como el mejor artillero de los Pumas en los tres partidos de Liguilla que han disputado.
“Cuando estás en una posición más adelantada, pues tienes más oportunidades de meter gol. Todo el torneo lo jugué de central y es difícil irte al ataque, pero como carrilero en línea de cinco, encuentras pelotas de gol como las que me han tocado”, describe el defensa auriazul.
Velarde Calvillo se siente cómodo en esa posición de “anotador”. Pero antes, prefiere ser considerado por su técnico en el once ideal, porque sabe que antes de vulnerar metas contrarias debe defender la propia.
“Me gusta mucho esta posición [de lateral con salida hacia el ataque], pero más me gusta que el entrenador me tome en cuenta en cualquier posición que él lo requiere. Ahorita me siento muy feliz con lo que estoy haciendo”, presume el capitalino.
Hasta antes de esta fase final, el Chispa sólo había podido anotar un gol en Primera División. Sin embargo, las circunstancias de los últimos dos partidos le han permitido marcar; curiosamente, todos sus remates han sido de “palomita”, lo que el puma minimiza.
Por eso, se enfoca en el partido de hoy ante Chivas. Toma como los puntos fundamentales para avanzar la intensa presión que suelen ejercer.
“La clave es el esfuerzo del equipo, porque tenemos concentración y mucha intensidad como lo mostramos en el partido de ida ante Chivas y esperamos un partido muy difícil”, anticipa.
Que nadie descarte a Velarde para ser otra vez el héroe inesperado con un gol, el que puede ser la “chispa” adecuada, para que Pumas esté en la final.
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