PASARON apenas 48 horas de aquella explosión de Guillermo Vázquez Herrera al terminar el juego final por el campeonato Clausura 2011, en el que Pumas lograba por séptima ocasión el título de liga. Y es el joven técnico del equipo Universidad quien atiende a ESTO en exclusiva.
"Fue un momento en donde no pude controlar mis sentimientos, me olvidé de la cámaras y de todo y me di vuelta para festejar con los que estamos en este momento del club, como son Carlos Gutiérrez -él recibió el primer abrazo-, Alejandro Pérez, Ricardo Gómez y Martín Reyna, fue un instante, luego fue con los jugadores, porque ellos son los que merecen todos los halagos. Ya que prefiero guardar un perfil tranquilo, porque así soy, no me agradan los reflectores, aunque comprendo que en estos momentos es necesario", así comenzó esta charla exclusiva con Guillermo Vázquez Herrera y ESTO.
Pero no todo es el logro del campeonato, no todo es el éxito actual, sino tratamos de dar una vuelta por el mundo pasado, presente y futuro del segundo técnico de Pumas en conseguir en su primer año como tal, un campeonato (el otro fue Bora Milutinovic).
CASERO POR NATURALEZA
Todo hombre tiene sus virtudes y defectos, pero en Memo la balanza se inclina más para el primer lado, porque hoy, ya todo un hombre, sigue siendo el mismo que conocimos.
"Soy tranquilo, me gusta mucho disfrutar a mi familia, llevo 18 años de casado con María Luisa -ella es de la ciudad de Monterrey, ahí la conoció cuando jugaba en los Rayados y se casaron muy jovencitos- y trato de aprovechar al máximo los tiempos que deja el futbol para estar con mis hijos: Natalia, Valeria y Guillermo".
Le decimos un Memo más en la familia y se ríe "no podía ser de otra manera", nos dice.
Trata todos los días de llevar a sus hijos al colegio y si no hay compromisos profesionales estar a la hora de la comida y la cena en casa. "Soy muy casero, me gusta vivir con los míos en casa, disfruto mucho estar ahí. Es algo que uno trae de sus enseñanzas de origen y me agrada ser así.
"Uno por compromisos profesionales, tiene que viajar mucho, estar fuera de casa por varios días, pero cuando tengo tiempo, aprovecho para ir al cine, que es lo que nos gusta, porque aunque la vida de un técnico es y será siempre estar cerca del futbol, también hay que hacerse un espacio para con los que te puedes apoyar en los momentos complicados".
Cuenta con un hombre siempre a su lado como su padre "es un incondicional. Es un apoyo en todos los sentidos, además le gusta mucho en lo que está. Viendo crecer a los jóvenes jugadores y a todos los entrenadores que están en fuerzas básicas. No tengo palabras para explicarte lo que es. No en estos momentos gratos, sino lo que ha sido en mi carrera.
"También no me puedo olvidar lo que es Mario Trejo para el equipo, un hombre que quiere a Pumas y que siempre está al tanto de nosotros todo lo que se requiere, es alguien con quien sabemos que podemos contar en los momentos muy difíciles. Sé que pronto tendré que sentarme con él a platicar lo de los contratos, pero eso es algo dentro del plano profesional y como tenemos el mismo sentimiento por Universidad pienso que nos arreglaremos sin problemas".
DEL TÍTULO AL APERTURA 2011
Todo se resolvió en 180 minutos y al final levantar la copa de campeón.
Los abrazos con su padre -el arquitecto Guillermo Vázquez- con su "tío" -así puedo llamarle- al doctor Mario Trejo, pero, Memo nos explica sus sentimientos durante la liguilla.
"En lo personal tenía la experiencia como responsable total del equipo del pasado torneo, pero en éste, observé al equipo más seguro, aunque no es fácil jugar una liguilla, porque aunque tuvimos que hacer lo nuestro como locales con el gran apoyo de nuestra gente, en el juego final, uno se siente muy tenso, pues en cualquier momento puede cambiar todo, porque Morelia fue un gran rival, creó ocasiones de gol y aunque las pudimos resolver, no creas que fue fácil vivirlo.
"Al final todo se compensó, pero el mérito es totalmente de los jugadores, de mi equipo de trabajo, de los directivos y de todos los que conforma el club Universidad.
"Lo que me pasó, ser campeón, es producto de un trabajo de todos los que laboran en fuerzas básicas de donde salieron estos jóvenes que tienen que darle mucho más a Universidad, porque aunque sé que algún día tendrán que emigrar, es muy temprano para pensar en ello.
"Y qué decir de los veteranos, con quienes platico mucho, porque es y será importante conocer otras opiniones, porque está Israel Castro, Francisco Palencia, Dario Verón, Juan Carlos Cacho, Leandro y Dante López que fueron piezas claves para obtener el campeonato.
"Ser campeones fue un todo, en una comunión de ideas y de esfuerzos. Pero no por ello voy a cambiar. Seguiré siendo el mismo de siempre, con mi manera de ser y comportarme. Sé que el éxito tiene tiempo corto para disfrutarlo, porque en breve ya hay que pensar en lo que vendrá, en la renovación de los contratos, en que todos los fundamentales del plantel continúen y es ahí donde la directiva debe hacer otro esfuerzo, como aquel que platicamos de enviar a los jóvenes a torneos internacionales.
"Es también necesario sentarse a conversar, a planear lo que vendrá, a lo que deseamos aspirar y lo tenemos que mantener. Porque ahora es un compromiso mayor por ser campeones, y para ello hay que estar todos de acuerdo".
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